5 de febrero de 2010

Hoy hablare bonito

Siempre que estoy enfrente del monitor me quedo en blanco, siendo que todo el dia traje cosas en la cabeza que ansiaba vaciar aquí y con el paso de las horas se van quedando en cosas, gente y olvido.

Se acuerdan cuando se enamoraron? En la primera vez que juntaron sentimiento con cuerpo.

Me quiero centrar en el momento que ves a la persona que te gusta. El solo pensarlo te hace sonreír, con esa particular mueca diota. Cuando sientes por primera vez la ansiedad de que llegara, lo presientes, el nervio que se siente en el estomago, en las manos. La electricidad que te prende por dentro que hace que no puedas estar quieto y que es terrible por que estas luchando por aguardar las apariencias.

Lo ves y el instinto despierta.

Se acerca, te abraza, lo hueles y sabes que ya perdiste. Te besa y sientes que algo te quita el aire e irremediablemente se te nubla todo y te concentras en la humedad de sus labios que ya te esta haciendo estragos. No existes fuera de ahí. Eres torpe e irremediablemente tienes que tocar, ir conociendo el cuerpo e ir conquistando los puntos sensibles, esos que notas inmediatamente por que se estremece y se vuelve mas intenso todo y al igual empieza a reconocer los tuyos, la lucha de poder por quien hace sentir mas al otro. Es tan bonito estrenarse. Después viene cuando no puedes esperar a volver a verle, cuando mal se pone enfrente y no puedes dejar de tocarlo, no te importa donde estés y te gana la pasión. Digo, acuérdate de ese parque, estacionamiento, salón o baño en donde te agarro el temblor (si esos lugares hablaran..en fin). La risa nerviosa de no saber por donde vas pero que sabes que por ahí es, de tomar posesión de la nueva tierra, esa complicidad de que, ya tienes historia en esa piel, ahora pase lo que pase, nadie la podrá quitar. Y después de todo, cuando llegas a tu casa, te das cuenta que estas impregnado de su esencia y te ríes, suspiras y te sientes entupidamente feliz al recordar paso a paso el encuentro repasando los detalles y maquinando los nuevos encuentros.

Hay que repetir esos milagritos.

Soy adicta a la infatuación.

1 comentario:

Ministry of Silly Walks dijo...

Y dónde se compra la infatuación? Me urge un poquito.